LA RETRACCIÓN EXTREMA

La retracción extrema es un fiel indicador de precariedad, restricción y poca abundancia. Se produce cuando el entorno es muy desfavorable o en los casos que la reserva energía se ve altamente afectada, ya sea por falta de recursos vitales o avanzada edad. La retracción extrema podemos observarla en personas muy ancianas con la piel “pegada” al rostro, produciendo el hundimiento exagerado de entrantes y salientes, dando la apariencia de un Modelado abollado. La naturaleza es sabia y esto ocurre cuando el cuerpo vivo resguarda y ahorra su escasa o casi nula provisión energética, para poder resistir y sobrevivir al máximo. Desgraciadamente también podemos observar la retracción extrema en niños del tercer mundo por falta de alimentos y recursos.

PSICOLOGÍA

En el caso de la retracción extrema, el predominio es el aislamiento y la introversión. Pueden existir comportamientos oscilatorios, prefiriendo la tranquilidad como también puntualmente el jolgorio. Disfrutan de cada momento casi como si fuese el último, pero al unísono da extraña sensación de que importa poco. Existen estados eufóricos y de decaimiento. El ser se mantiene al margen de las cosas, con tendencia o posibilidad de comportamientos infantiles momentáneos. Suelen ser personas generosas y despegadas de lo físico, pero también pueden mostrar interés por acumular cosas, incluso basura o desperdicios domésticos en casos extremos “Síndrome de Diógenes”, acompañado por la psicología del abandono personal y social. Son selectivos y no vacilan en decir cuanto piensan a los demás, aunque no sea el lugar ni el momento.

Ilustración y textos: Moisés Acedo Codina

Morphopsychologue nº3898 SFM París

Fotografías:

Niño del tercer mundo

Científico Nikola Tesla en su ancianidad

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