He podido observar en multitud de padres muy tónicos y activos, unos hijos muy átonos o lo que es lo mismo, pasivos. Esto tiene una simple explicación: La hiperactividad de los padres, muy protectores, impidió que el niño desarrollase su tonicidad (actitud activa ante la vida) al querer coger un objeto, comer solo, etc... ya que los padres se adelantaban realizando lo que el niño quería, impidiéndole todo “ipso facto”.
Este lamentable, innecesario y lógicamente inconsciente error, incapacita al niño durante su crecimiento a desarrollar su facultad más importante "la lucha ante la vida", dejándole marcado para siempre con un carácter despreocupado y de difícil solución posterior. De igual modo, habría que evitar el uso del biberón (en la medida de lo posible), ya que es más fácil la salida de leche que en el pecho materno, el cual hay que succionar con movimientos instintivos para la salida de la misma. Por este motivo es de suma importancia, que desde la infancia el niño reciba estímulos para favorecer su desarrollo físico y mental, enriqueciendo su tonicidad o "firmeza" ante los sucesos, incrementando así su objetividad, ambiciones y metas, sin dejarse llevar por el "libre albedrío" o hacia donde sopla el viento a merced de los demás.
Ilustración y textos: Moisés Acedo Codina
Morphopsychologue nº3898 SFM París
Para más información:
http://www.morfopsicologia.org/
http://gabinetedemorfopsicologia.blogspot.com/
Muy lindo articulo! Nosotros en nuestro (poquito) tiempo libre tratamos de investigar todas las experiencias para poder reforzar la nuestra como padres! En este ultimo tiempo encontré aqui varias cosas interesantes sobre bebés: www.nutri-baby.com . Espero que les sirva!!
ResponderEliminarMuchas gracias Patricia y muy buen enlace. Saludos!
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